El Príncipe del Acordeón conquista La Guajira

Por Robinson De León Pérez

A las 4:40 de la tarde,  Luis Guillermo De La Hoz recuerda uno de los momentos con más incertidumbre en su vida musical: el final de su unión musical con Elder Dayán Díaz tras 6 años y medio de luchas para salir adelante.

‘Guille’ (como le dicen sus amigos y seguidores) baja la cabeza y respira. Recuerda que fueron varios años en los que tocaron muchas puertas para poder iniciar vuelo en la música y así poder empezar a sonar su acordeón junto a la voz de su ex compañero de fórmula musical.

Hoy, varios meses después, respira profundo de nuevo y con voz entrecortada dice:

-Todo se lo debo a Dios, quien es mi guía. He tenido mucha paciencia en este largo camino.

De La Hoz se levanta de la cama y  cambia el tema de conversación. Hace un chiste y de inmediato conjura su situación diciendo que pasa un excelente momento musical con Fawell Solano, su actual compañero. Con él hay buena química y será con él con quien se presente el domingo en Barrancas y Maicao, dos municipios de La Guajira donde llegaría esta unión vallenata para alegrar al público.

Guillermo De La Hoz es el padre de Luis Guillermo. Con orgullo y seriedad resalta lo antes dicho por ‘Guille’. El padre siente alegría al ver la acogida que la unión de Solano y De La Hoz ha tenido en el público.

Dicen los que saben –o dicen saber- que De La Hoz llegó en un momento clave para la vida musical de Fawell Solano, quien se encontraba en un bache y del cual sale con el apoyo de Luis Guillermo De La Hoz, quien llega para salvar la carrera por decirlo de esa manera.

Es hora de irse a Barrancas. De La Hoz ha estado en Fonseca con el resto de la agrupación. Empieza la maratónica jornada de los artistas. Sobre las 10 de la noche llegan a Barrancas, el primer destino de la noche para ejecutar su acordeón. Luis Guillermo siente nervios antes de cada una de las presentaciones y se libera de la presión contando anécdotas con personas cercanas a él. Mientras se ríen, le hacen el primer llamado para tarima. Se hace la señal de la Cruz y sube con una gran sonrisa.  En medio de los aplausos alza sus manos saludando al público asistente, agarra su acordeón para interpretar la primera canción al lado de su cantante.

En medio de la presentación Fawell pide un fuerte aplauso para “El Príncipe Del Acordeón”, como se le conoce a Luis Guillermo en el mundo musical. La gente disfruta con cada una de las notas ejecutadas y en el rosto de ‘Guille’ se ve una gran felicidad, su objetivo de conquistar el primer destino se cumplió.

Hacía las 12:45 de la noche interpretan la última canción. De La Hoz termina esa presentación, baja de tarima, mira al cielo, agradece a Dios porque una vez más conquista a un público exigente. Se cambia de ropa para estar fresco y esperar la llegada del auto en que se va a desplazar para llegar la segunda presentación.

Entrada la madrugada, pasadas las 2:00 AM, toda la organización musical llega a Maicao, su segundo compromiso musical. Luis Guillermo comenta que se encontró con algunos ex compañeros y dialogó un rato con ellos. Les preguntó por cómo iba todo el proceso musical y antes de irse, le envía saludos a Elder y a Rolando, el veterano acordeonero que ahora acompaña a su excompañero.

Estando en Maicao, ‘Guille’ sube al bus donde se encuentran todos sus nuevos compañeros de batallas e inicia una charla con ellos, cuenta otra anécdota y los que están a su lado ríen otra vez. De La Hoz acostumbra a usar gorras en  sus presentaciones. Aquí cambiará. Esta presentación es privada, es un matrimonio. Allí es donde “El Príncipe Del Acordeón”  llegará para alegrar con la melodía de su acordeón.

Vestido con un atuendo acorde con la ocasión, y sombrero en vez de gorra, vuelve a sentir nervios antes de su presentación. Seguidores e invitados a la fiesta se acercan para pedirle fotografías. Sonríe y a cada uno les regala la foto.

A las 4:20 de la madrugada, casi doce horas después de haber empezado esta historia, le hacen el llamado a tarima. En el camino, más personas se acercan para pedirle fotos que él también concede. Con su acordeón al pecho, ejecuta melodías que acompaña la cortina musical que funge de prólogo a la llegada de su compañero a tarima. Por más de 2 horas estuvieron en tarima, la gente solo comenta que es una unión que tiene un gran respaldo de Dios y está por conquistar a Colombia.

Culminada la presentación, con algo de cansancio y la elegancia de su traje, Guille se reúne con su padre, los mánagers, con Fawell y con el grupo de trabajo para hablar un poco de lo que se vivió en las dos presentaciones. Pidió el balance de cómo se había sentido la acogida del público en las presentaciones. La conclusión: “Gracias a Dios se cumplieron las expectativas”.

Con la satisfacción de cumplir los objetivos y con un poco de cansancio guarda sus acordeones. Se cambia de ropa por tercera vez, ahora algo cómodo para estar más fresco y quedarse hablando con sus amigos cercanos. Algunos de sus músicos deben regresar para Santa Marta, él mismo los acompaña para agradecerles y desayunar con ellos. Se despide de sus muchachos, habla por varios minutos con su padre. Tras un rato me dice que vienen grandes cosas. Hasta un nuevo videoclip musical.

-Los buenos momentos están llegando y Dios guía para seguir el camino del triunfo.