Alemania incluye a Cataluña, Aragón y Navarra en "zonas de riesgo" por coronavirus tras el aumento de los rebrotes

Las autoridades alemanes han pasado de desaconsejar a sus nacionales viajar a Cataluña, Aragón y Navarra a incluir esas comunidades autónomas en la relación de "zonas de riesgo" por Covid-19. No ha sido una decisión política. En esas tres regiones se han producido más de 50 nuevos casos por cada 100.000 habitantes en siete días, que es el baremo acordado en la Unión Europea cuando se procedió a la reapertura del espacio Schengen.

En el marco de la Unión Europea, el ministerio alemán de Sanidad sólo había declarado "zona de riesgo", escalafón previo a la "alarma" a Luxemburgo. Fuera del territorio comunitario, forman parte de esa lista Bosnia-Herzegovina y Serbia, Turquía, Estados Unidos y prácticamente toda América Latina -excepto Uruguay-, además de amplias zonas de África y Asia.

El argumento esgrimido este vienes por el Instituto Robert Kock (RKI), al que compete en Alemania el seguimiento de la pandemia, es impecable. No se han hecho los deberes y la factura va al sector turístico español. "Si un país acumula más de 50 nuevos casos de Covid-19 por cada 100.000 habitantes en siete días, se revisarán las recomendaciones de viaje", alertaba el Ministerio alemán de Asuntos Exteriores en su página web. Este criterio se utiliza para regiones de las que se disponga cifras "fidedignas". Para valorar la situación en países sin estadísticas fiables se recurre a las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La declaración de "zona de riesgo" no implica prohibición de viajar, pero su carácter disuasorio es lapidario. Implica que todos las personas, incluido nacionales, que viajen hasta nuevo aviso, deberán comunicarlo a las autoridades sanitarias correspondientes y guardar 14 días de cuarentena en virtud de las ordenanzas aprobadas por los distintos estados federados. Además, todos los viajeros podrían verse obligados a realizarse un test de Covid-19 en el aeropuerto de entrada, salvo que presenten un documento que pruebe que se sometieron a un test en las últimas 48 horas.

Si la recomendación a primeros de semana del Ministerio de Asuntos Exteriores de no viajar a Cataluña, Aragón y Navarra permitía a los alemanes cancelar sus vacaciones sin coste, la vuelta de tuerca ahora dada empujará definitivamente a las anulaciones. El Ministerio, además, ya ha advertido a sus nacionales de que no repetirá la millonaria y compleja campaña de repatriación llevada a cabo en los primeros meses de la pandemia, por lo que cualquier turista que no siga las recomendaciones deberá retornar al país por sus propios medios y asumir todas las consecuencias.

De las tres comunidades autónomas declaradas "zona de riego" la más afectada en términos económicos será Cataluña, aunque habrá daños colaterales en todo el país en tanto que afecta al conjunto de la imagen de España.

Cataluña, es junto a Baleares y el archipiélago canario uno de los destinos favoritos del turismo alemán, tanto para familias y parejas como para el turismo de fiesta. Los bajos precios en la Costa Brava, la generosidad del clima y la naturaleza han colocado destinos como Lloret de Mar, Calella, Playa de Aro , Malgrat de Mar, Tossa de Mar, Sant Feliu, Sitges y Barcelona en los primeros puestos en cuanto a preferencias.

El turismo alemán en Aragón y en Navarra se concentran en torno a la festividad de San Fermín, ya pasada, o se extiende a un tipo de turismo más interesado en la gastronomía y la etnología, viajes que, en comparación con otras regiones de España, es minoritario.

Temor a la importación de casos

Los principales focos de atracción de alemanes quedan pues al margen de esta decisión, que no deja de ser también un aviso a navegantes. Las autoridades sanitarias alemanas siguen atentos a la evolución de la pandemia y los diarios alemanes ya se han hecho eco de los primeros casos positivos de turistas en Baleares. Una familia de cuatro miembros ha dado positivo a su regreso de las vacaciones en Baleares y en Mallorca hay actualmente diez turistas en cuarentena en el Hotel Morlans Garden de la ciudad de Pegura a unos 25 kilómetros al sur de Palma de Mallorca. Los costes de la estancia y atención medica los ha asumido el gobierno regional, que no ha informado de la nacionalidad de esos turistas.

Mientras no se supera la barrera de esos 50 nuevo casos por cada 100.000 habitantes en siete días, las autoridades alemanes no intervendrán, pese a los temores de que una importación de casos empeore la situación en el país, donde se siguen produciendo la inmensa mayoría de los contagios.

Hasta ahora, el RKI ha verificado 207.828 contagios, de los cuales 191.800 corresponden a pacientes ya recuperados. El número de muertos se sitúa en 9.134.

El cómputo de contagios en las últimas 24 horas es de 902, una cifra más elevada que en los días anteriores, con entre 800 y 850 nuevas infecciones. Eso implica un claro repunte respecto a los entre 300 y 350 nuevos casos que se registraban a diario hace apenas dos semanas.