Territorio, violencia y desterritorialiación

TERRITORIO,  VIOLENCIA  Y DESTERRITORIALIACIÓN

El territorio es más que un espacio físico. Va más allá del soporte físico de las actividades humanas, para transformarse en un sistema complejo donde interactúan factores culturales ambientales, económicos, sociales, políticos y en este sentido, el primer territorio más próximo en  nuestra experiencia es el cuerpo y desafortunadamente el menos explorado y asumido con autonomía, sobre todo el de las mujeres donde otros escriben y prescriben: hombres,  familia, religión,  mercado, etc. Pero no es éste el tema primordial en este espacio. Me quiero referir  al lugar donde las personas y las comunidades arraigan y afirman sus valores, pudiendo de esta manera hablar de un proceso de territorialidad, entendida, como la forma en la que el ser humano se identifica con el lugar, La territorialidad supone la conformación de un nexo fuerte de identidad, pues es el lugar de sus experiencias de vida, de lazos afectivos, creencias, percepciones y significaciones que hacen que se establezca una unidad entre el yo y el lugar.

Justamente para los indígenas el territorio es todo, ahí está: el sustento, sus memorias, su cultura y los espíritus guardianes de la naturaleza, por eso su defensa es un compromiso impostergable. Su vida ha transcurrido en procesos de resistencia desde la primera invasión y aniquilamiento de su cultura hasta hoy, cuando se creía que con  la constitución del 91, los indígenas alcanzaron una serie de derechos, entre éstos el derecho al territorio. Pero miren lo que está ocurriendo en la actualidad, Los están asesinando porque se niegan a que sus territorios sean usados para la explotación minera y para  extender los narcocultivos que suman 61.175 hectáreas en Cauca, Chocó y Nariño– y crear corredores por donde se mueve coca, marihuana y armas. Sus líderes no dudan en calificar de genocidio la muerte un número considerable de comuneros, autoridades, líderes y lideresas.

Por todo esto es  tan importante hablar de territorio como hablar de desterritorialización, la cual hace referencia  a la pérdida de sus territorios como producto de la pugna de poderes entre los grupos armados de la mafia y de las guerrillas disidentes que los lleva a un desplazamiento forzado  Pero también los expulsan de sus territorios  la globalización y el consumismo que causan la perdida de sus culturas, lo que  hace que  muchos principalmente jóvenes  emigren a las ciudades en búsqueda de  falsos  halagos y  éxitos que nunca llegaran y en cambio  sí engrosan los cinturones de miserias de esos lugares urbanos en  donde están  condenados a vivir en sitios indiferenciados, rompiendo toda relación con la historia y la memoria de los lugares, donde existe una amnesia territorial, que puede significar extrañeza y desculturización.

El Estado que supuestamente es el garante de los derechos de los ciudadanos ha sido incapaz de frenar toda esta ola de violencia que se viene dando en el país especialmente en los territorios ya señalados.  Estamos inmersos en una situación de impotencia, de asombro y de incertidumbres que como se dijo del caso violento de Bojayá "ya no hay tiempo para la tristeza”, no nos acabamos de reponer de una masacre, cuando llega la otra. El llamado es a fortalecer el movimiento social y nuestras organizaciones sindicales, no perdamos el tiempo en disputas internas, apuntemos a la unidad.

OFELIA RAMIREZ  LOZADA

Directiva de ASPU- Huila